Para muchos historiadores, el Tarot empezó como un juego
llamado Tarocchi, o Les Tarots en francés.
Hoy en día seguimos teniendo maneras de jugar con las cartas
del tarot conectándonos además con los mensajes simbólicos de éstas.
Uno de estos juegos consiste en dos jugadores que participan
a la vez del juego, cada uno elige una carta sin que la otra persona la vea,
entonces empiezan a interactuar metiéndose en el papel del personaje de la
carta. Pongamos por ejemplo que un jugador elije el siete de copas y el segundo
el cinco de oros (ambos de la baraja del Rider Waite), empiezan a hablar (o
actuar) representando cada uno su papel:
(7 copas): ¿qué podríamos hacer hoy? ¡Igual nos toca la
lotería! Ricos como nunca habíamos soñado.
(5 oros): me encuentro mal, lo he perdido todo. Sé que
estarás conmigo a pesar de las circunstancias, sólo espero que podamos
sobrevivir.
(7 copas): ¿estás enfermo? Quizás sólo te queden dos
semanas de vida ¡vamos a dar la vuelta al mundo!
…
Mantenemos el juego unos dos minutos y luego cada
participante debe adivinar la carta del otro
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